"En Serbia ya no existe la libertad de pensamiento, de expresión ni de creación."

Como cada verano, se celebran festivales por toda Europa que celebran la vitalidad y la abundancia de la creatividad global. Mientras tanto, en Serbia, a las puertas de la Unión Europea (UE), la represión brutal y sistemática está desatando a su gente y al sector de las artes escénicas. Desde el 1 de noviembre de 2024, fecha del inicio del movimiento de protesta que sacude a toda la sociedad serbia ( 140.000 personas se manifestaron en las calles de Belgrado el 28 de junio ), los profesionales de las artes escénicas han proclamado con vehemencia su apoyo a los estudiantes que se manifiestan pacíficamente contra la corrupción y por el restablecimiento del Estado de derecho.
Y lo están pagando caro. Tomemos el caso de Nikita Milivojevic, símbolo de la actual deriva autoritaria. Conocido en toda Serbia y con prestigio regional e internacional, este director siempre ha defendido el espíritu de resistencia y la libertad de expresión, en un contexto que ha descrito durante años como hostil a cualquier voz disidente.
Tras una serie de acontecimientos ya reportados por la prensa internacional, y tras su apoyo al movimiento, Milivojevic no fue reelegido como director artístico del prestigioso Bitef (Festival Internacional de Teatro de Belgrado), que le había sido confiado en 2023. La decisión también está vinculada, según varias fuentes, al discurso pronunciado por el director suizo Milo Rau en la inauguración de la edición de 2024, en el que este último cuestionó los planes de explotación de minas de litio en el corazón de Serbia [frenados por la movilización entonces relanzada por el presidente de Serbia, Aleksandar Vucic] por la compañía Rio Tinto, proyectos apoyados por la UE en busca de nuevas fuentes de suministro para impulsar su transición ecológica. Además, se retiró la subvención para el festival de Shakespeare, creado hace doce años por Milivojevic, y se cancelaron los dos espectáculos que debía dirigir en teatros públicos durante la próxima temporada.
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Le Monde